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El fin que nunca llega.

Ese vacío inexplicable que no puedo llenar con nada, esas lágrimas que brotan en ciertos momentos, el nudo en la garganta que no consigo desenredar.Intento ser la misma que supe ser pero... ¿era ella en realidad?  No, soy solo el invento o el imaginario de las personas.Puedo hacer una lista interminable de las virtudes y defectos que tengo a la vista de los demás pero lo único que verdaderamente puedo confirmar es que soy: NADIE. Así me siento y así me voy a sentir siempre, no importa los años que pasen. Nunca supe ser libre, ni siquiera en mi infancia y eso no va a cambiar ahora que los años han hecho su recorrido. Infinitamente triste y sola.

Del otro lado.

Ser o ya no ser. Estar al límite de lo terrenal y lo celestial. La vida de la fama no es para mí, solo dejaré de existir. Una de mis semanas más tristes, es la segunda vez que julio decide dejar una huella en mi corazón. El vacío hace su camino y destruye la poca felicidad que puedo reclamar. Me hago pequeña, miserable e invisiblre. El ojo humano solo ve una sonrisa pintada falsamente y no el tormento de mis ojos marrones. Lloro en silencio.

Olvido.

Siento tu respiración en mi nuca, estás tan cerca. Lo siento y me quema por dentro. Escucho el sonido de tu risa pero no te veo. Como un mal sueño, sé que te alejas de mí. Mi alma llora tu ausencia, ¿dónde estás? Otra vez vuelvo a caminar sola sin nadie más.

Broken.

No sé por cuanto tiempo pueda seguir aguantando de esta manera, la angustia me consume poco a poco.Son millones las veces que tengo ganas de llorar, de romper algo hasta que mis manos sangren, de gritar hasta que mis pulmones ardan... El existir porque sí ya no es tan divertido como antes y lo sé, mi voz interior lo asume plenamente. ¿Por qué sigo en este mundo?  Por el capricho de Dios, por el destino y porque jamás tendrías las fuerzas necesarias para apagar la llama de la vida. Ya ni sé por qué continúo caminando este sendero que parece nunca acabar. Sé que son pensamientos muy oscuros, crudos y quizás rocen el borde la locura, pero necesito descargarme en algún lado.Y a falta de un cuaderno (que podría ser leído por cualquiera), prefiero hacerlo por este medio. La verdad es que NO me siento contenta con quién soy hoy, nunca me había sentido tan vacía e inútil.Finjo estar bien con los que me rodean y parece que lo hago muy bien, al menos el mentir se me da. Soy solo un n...

Okay.

Llega un punto en que ya no queres (o podes) contar las cosas lindas que te pasan.Quizás porque me han tirado tanta mierda a lo largo de mi vida, quizás porque a solo UNA persona le puedo contar lo que me pasa realmente (y a veces hasta a ese ser no le cuento lo que se dice "todo"), quizás... solo quiero guardármelo para mí. Atesorar los pequeños momentos que me hacen bien para que nada ni nadie me los arruine.Hay tanta negatividad esparcida que es preferible no contaminarme yo también. Me siento bien y no sé por cuanto tiempo dure, aún así prefiero vivir el momento y ser yo misma.

Hielo.

Un día, hace tiempo atrás, ella fue la niña que abrió su corazón por primera vez.Creyó que todo sería color de rosa, como esos cuentos de hadas que tanto le gustaba escuchar, y así fue por un corto lapso de tiempo. Hasta que un enorme dragón apareció en escena, tiñendo a su paso todo de gris y tormenta.Ella se refugió en una cueva alejada, llorando y con miedo, mientras se auto-convencía diciendo: -Si me quedo acá, todo pasará y la tristeza se va a alejar. Pero el astro nunca volvió a surgir en el cielo, las nubes se hacían más pesadas, oscuras y aterradoras, los minutos avanzaban a grandes pasos.Su cuento de hadas, lleno de color y amor llegaba a su fin . No lo quería admitir, no quería pronunciar esas palabras en voz alta, el solo pensar en la palabra dolor hacía que se le destroce el corazón. Aunque sabía que debía tomar valor, esto le afectaba más de lo que podía tolerar y debía terminarlo por su propio bien. Así lo hizo, salió de su escondite y guardó casi sentimiento que ...

SonrisaS.

Quiero retratar tu sonrisa, pintar un cuadro de ella, llevarla como bandera.Para que en los días tristes y en los que el sol no brille tanto, sacarla a la luz para que el mundo no se olvide de ese gesto tan propio tuyo (y hermoso) Sos un faro entre tanto gris, un reflector que guía al barco a buen puerto, la puerta hacia la verdadera felicidad.Y si, tan solo puede que sea que muestres tus dientes pero no puedo explicar lo que logras en mí al hacerlo. Sigo observándote de lejos porque eso se tiene que hacer con la belleza que encandila, no acercarse mucho porque puede quemar.Lo prefiero así pero no me privo de admirarte, de seguir "idolatrando" tu preciosa sonrisa . Estoy segura que causas el mismo efecto es lo demás, ¡eso es genial!